NARANJAS FEAS
Se estima que cada año se desperdician unos 1.300 millones de toneladas de alimentos en todo el mundo (según la FAO). Abundan irracionales motivos estéticos.
Fruto de la concienciación sobre este problema han surgido diferentes movimientos como Ugly food en la UE, el proyecto Espigoladors en Catalunya o el proyecto Fruta Feia en Portugal. Todos ellos pretenden dar salida comercial a esta fruta que, sin seguir los cánones estéticos convencionales, es igual de nutritiva y sabrosa.
Hablando de naranjas, algunos de estos defectos estéticos que no afectan a su sabor o durabilidad son:
- Cicatrices en la cáscara provocadas por el roce de la naranja con una rama a causa del viento. Durante la seleccion destriamos las cicatrices que por su profundidad puedieren afectar a la pulpa.
- Manchas en la cáscara provocadas por insectos diversos, como por ejemplo, el conocido Trip.
- Naranjas de formas irregulares, por ejemplo, debido a la presión de una rama sobre la naranja durante su crecimiento.
- Abultamientos naturales en algunas piezas que generan formas curiosas.
En Naranjas de Cullera pensamos que no tiene ningún sentido destriar estos frutos, tanto por motivos éticos como económicos, por tanto, en alguna caja puede encontrar alguna fruta “fea” que, ¿por qué no?, pudiera ser la más sabrosa. Esto no contradice el hecho de que, en la mayoría de las ocasiones, al abrir una caja encuentre todas o la mayoria de las naranjas “bonitas”.
El destrío que generamos en Naranjas de Cullera incluye las que están demasiado maduras (también alguna no suficientemente madura, recogida del árbol por error), agrietadas, pinchadas por las ramitas de las otras al recolectar con hoja, con cicatrices profundas o muy extendidas en la cáscara, las afectadas significativamente por la acción de insectos o hongos, o las susceptibles de presentar baja resistencia al transporte (con estrías o “hinchadas”). Todas las anteriores las vendemos en una remesa semanal a la industria del zumo.
Hasta pronto amigos.