Orogròs / Oronules
DESCRIPCIÓN GENERAL:
Orogròs y Oronules son las más tempranas de la familia de las Clementinas. Tienen un tamaño mediano y color naranja intenso, aunque suelen conservar zonas verdosas en la cáscara estando ya maduras. Su pulpa es fina y de excelente sabor, por lo que están consideradas como unas mandarinas de muy buena calidad. Su zumo es también excelente. Su piel es blanda y ligeramente gruesa por lo que se pela fácilmente y se puede separar también fácilmente en jugosos gajos, siendo ideal para los niños. La Orogròs es una variante de la Oronules que madura entre 2 y 3 semanas antes.
CALIBRE:
El calibre medio de estas variedades oscila alrededor de los 60 mm de diámetro, siendo habitualmente las Orogròs un poco más pequeñas que las Oronules. El calibre mínimo comercial en Naranjas de Cullera para esta variedad es de 54 mm.
DURABILIDAD:
Los ejemplares más pequeños, sobretodo en la mandarina Orogròs, al tener la cáscara más fina, es probable que se reseque y, con el paso del tiempo cuesten de pelar, aunque siguen estando jugosas por dentro. Se conservan bien hasta 20 días después de la recolección, siempre siguiendo nuestras indicaciones para su conservación: sacarlas inmediatamente de la caja, esparcirlas en una superficie amplia, con temperatura y humedad no extremas, sin luz directa del sol ni fuentes de calor, y descartando toda pieza que pueda estropearse. Esto es una norma general, teniendo en cuenta que son perecederos y sin tratamientos postrecolección, también es posible que alguna pieza se estropee antes de los 20 dias.
POSIBLES INCONVENIENTES:
Al ser una variedad temprana, en un porcentaje bajo del total de la cosecha el calor puede secar algunos gajos o alguna pieza entera, siendo indistinguible del resto atendiendo a su aspecto externo.
Como la mayoría de mandarinas, pueden presentar unas pocas semillas debido a la polinización cruzada.
Cultivo convencional
Estas frutas provienen de un cultivo convencional, esto significa que pueden haber
recibido tratamientos convencionales durante su producción. Una vez recolectados,
únicamente se limpian con un trapo antes de su comercialización. No se les añaden
ceras, antifúngicos ni otros conservantes. En los tratamientos aplicados por
nuestros agricultores se utilizan, exclusivamente, productos autorizados por la
UE. Aún así, una parte significativa de las frutas que servimos provienen de
huertos que no han recibido ningún tratamiento de plaguicidas.